¡Urge! ¡Rescate de la Imaginación Colectiva! El Deber Imperativo de los Actores Sociales en la Crisis Presente

Juan Álvarez
El Intersubjetivista
5 min readMar 21, 2024

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Imagen: Diagrama de Venn sobre la relación entre la imaginación, la realidad y la creatividad por Juan Álvarez

En el tapiz complejo de nuestra realidad contemporánea, la creatividad, la imaginación constitutiva y el pensamiento crítico se erigen como los hilos vitales que podrían tejer el futuro prometedor que tanto anhelamos. Sin embargo, estos pilares esenciales están tambaleando bajo el peso aplastante de una crisis que no solo afecta la innovación, sino también nuestra visión colectiva. ¿Cuántos recursos más invertiremos en nuevas versiones de dispositivos electrónicos indistinguibles de sus predecesores? ¿Y cuándo comenzaremos a invertir en innovaciones que realmente transformen las vidas de las personas? En este análisis profundo, nos sumergimos en el corazón de esta problemática, señalando a aquellos que tienen el poder de guiar el barco hacia horizontes más audaces, pero que, en su mayoría, han naufragado en las aguas tranquilas de la complacencia.

La Realidad que Ignoramos:

La realidad es mucho más que un mero telón de fondo para nuestras vidas; es la roca sólida sobre la cual se construye nuestra comprensión del mundo. Sin embargo, esta realidad, aunque objetiva en su esencia, se vuelve subjetiva cuando se filtra a través de las lentes de la percepción individual y colectiva. Son estas percepciones, moldeadas por experiencias, creencias y valores individuales, las que a menudo nos alejan de una comprensión compartida y nos sumergen en un mar de interpretaciones divergentes y conflictos.

El Lamento de la Creatividad Sofocada:

La creatividad, esa musa que ha inspirado a artistas, científicos y revolucionarios a lo largo de la historia, está siendo sofocada por la mediocridad y la complacencia. En un mundo que valora la uniformidad sobre la originalidad, las ideas audaces se desvanecen en el clamor de la conformidad. La creatividad, lejos de ser un simple acto de imaginación, es la fuerza vital que da vida a soluciones innovadoras y transformadoras. Es el antídoto contra la monotonía y la obsolescencia, el motor que impulsa el progreso y la evolución de la sociedad.

La Imaginación Constitutiva: Forjando Realidades Alternativas:

La imaginación constitutiva es el faro que nos guía más allá de los límites de lo conocido, explorando los vastos territorios de lo posible. Es el lienzo en blanco donde pintamos nuestras visiones más atrevidas y nuestras aspiraciones más elevadas. A través de la imaginación constitutiva, construimos puentes hacia mundos alternativos, dando forma a la realidad según nuestros deseos y sueños más profundos. Es esta capacidad de visualizar y construir realidades alternativas lo que nos impulsa a desafiar el status quo y a buscar nuevas formas de organización y convivencia.

La imaginación constitutiva: tejiendo el futuro desde el presente

Imagina por un momento un lienzo en blanco. En él, podemos plasmar cualquier cosa: paisajes exuberantes, ciudades futuristas, o incluso mundos imposibles. La imaginación nos da la libertad de crear sin límites. Pero, ¿qué pasa si te digo que la imaginación no solo sirve para soñar, sino también para construir la realidad?

Aquí es donde entra en juego el concepto de imaginación constitutiva. Esta idea, desarrollada por filósofos como Cornelius Castoriadis y Claude Lefort, nos propone que la imaginación juega un papel fundamental en la configuración de nuestro mundo social y político.

¿Cómo funciona la imaginación constitutiva?

En primer lugar, la imaginación constitutiva nos permite pensar en alternativas a la realidad actual. No estamos condenados a aceptar el mundo tal y como es. Podemos imaginar cómo sería una sociedad más justa, más equitativa o más sostenible.

En segundo lugar, la imaginación constitutiva nos da la capacidad de actuar para convertir esas ideas en realidad. Podemos crear nuevas instituciones, nuevas formas de organización social y nuevas relaciones entre las personas.

La imaginación constitutiva es una herramienta poderosa que nos permite dar forma al futuro. Nos permite soñar con un mundo mejor y, lo que es más importante, nos da la capacidad de hacerlo realidad.

Los Actores Sociales y su Responsabilidad:

En este oscuro panorama, los actores sociales –los políticos, líderes de opinión, filósofos y universidades– se levantan como guardianes de la llama de la creatividad y la imaginación. Sin embargo, en lugar de alimentar este fuego, muchos han optado por sofocarlo con la mediocridad y la complacencia. Los políticos, atrapados en el ciclo interminable de la política partidista y el cortoplacismo, descuidan la promoción de políticas que fomenten la creatividad y el pensamiento crítico. Los líderes de opinión, en su búsqueda de popularidad, perpetúan narrativas simplistas y estereotipadas que ahogan el potencial creativo de la sociedad. Los filósofos, atrincherados en debates abstractos, han perdido de vista su papel como agentes de cambio social. Y las universidades, enfocadas en formar técnicos y especialistas, han relegado la creatividad y la imaginación a un segundo plano.

Es imperativo que los actores sociales asuman con urgencia su responsabilidad ante esta crisis de la imaginación. Los políticos deben dejar atrás las promesas vacías y adoptar políticas que estimulen la creatividad y el pensamiento crítico, en lugar de priorizar su próxima reelección. Los líderes de opinión deben cesar de alimentar la polarización y empezar a promover el diálogo y la colaboración. Los filósofos deben abandonar sus torres de marfil y ofrecer análisis profundos y propuestas significativas para abordar los desafíos contemporáneos, contribuyendo así a escribir la nueva narrativa tan indispensable en esta era. Y las universidades tienen la responsabilidad de reconocer la importancia de fomentar la creatividad y la imaginación en sus estudiantes, formando no solo técnicos competentes, sino también ciudadanos críticos y visionarios.

La crisis de la imaginación es un desafío que va más allá de lo individual y lo colectivo, penetrando en el tejido mismo de nuestra sociedad. Nos enfrentamos a una llamada urgente para despertar del letargo de la complacencia y reconocer la vital importancia de la creatividad y la imaginación. La falta de estas habilidades no solo nos sume en la desesperanza, sino que también nos condena a la superficialidad, donde las soluciones son solo de apariencia y las propuestas carecen de visión. Además, nos arroja hacia un abismo de distopías, donde la ausencia de imaginación constituye un caldo de cultivo para escenarios sombríos y desalentadores. Solo al asumir nuestra responsabilidad colectiva y comprometernos con un futuro audaz y esperanzador, podemos superar esta crisis y erigir un mundo donde la creatividad y la imaginación sean los pilares que sostienen nuestra realidad compartida.

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Juan Álvarez
El Intersubjetivista

Autor, filósofo y especialista en narrativa, creatividad, pensamiento disruptivo, y líder en servicios creativos. Story-Coach, guionista y marketer digital.